martes, 3 de marzo de 2015

La mala praxis

Lunes 2 de marzo

Novela: "La mala hora"
Autor: Gabriel García Marquez
Ganador: Juan Domingo Isa, abogado, de Olivos
Premio: "La mala hora"
Tiempo: `3 "27

Para los lectores de Garcia Marquez, un público en sí mismo, no debe haber sido difícil lo que Hugo leyó anoche, si bien es una de sus primeras novelas, muy anterior al éxito y la popularidad. Aparecen en el inicio un par de nombres propios, un sacerdote que apunta como protagonista, una iglesia pueblerina. A mí no me sirvieron de nada. Como ya escribí alguna vez, este colombiano no es santo de mi devoción; sin embargo, leí con gusto "La hojarasca" y "El coronel no tiene quien le escriba". "Cien años de soledad" lo tenemos ahí, en un estante, pero nunca pude entrarle. Una cuestión de piel, como se dice.
A Juan Domingo, el oyente ganador, tampoco le interesa ese tipo de literatura, dijo; lo ayudó su esposa a reconocer el primer Parrafus de marzo. Hugo acotó que era preferible la ayuda de una esposa a… otras ayudas.
Fue, creo, una nueva referencia al googleo, tema con el que parece especialmente atacado en esta temporada. Con Marta, la compañera oyente de Bahía Blanca, coincidimos en que nuestro conductor está muy insistente con eso. “No des ideas, Huguito”, pensamos al unísono, vía chat, el otro día. Cierto es que ya en la anterior temporada de Parrafus hubieron algunos oyentes (cuatro) que confesaron el uso del buscador para saber lo que se leía (uno de ellos, una vez, quien esto escribe)(1), y que el juego, así, no tiene gracia. Pero ahora, tras tanta prevención, ya aparecieron casi esa misma cantidad de guglistas. Hugo recalca que no se los descalifica, que reciben el premio igual, pero, dice, jugar así es jugar a otra cosa. Parrafus Interruptus, digo yo, fue siempre un juego de memoria libresca, de íntimas, lejanas, misteriosas resonancias dejadas por un texto, que vuelven milagrosamente al escucharse otra vez su lectura. Un juego de eso (descripto de modo tan cursi) y de la velocidad en el teléfono para comunicarse con la radio. Urgir a los deditos, en cambio, para tipear en la PC algunas palabras de la lectura, no da lugar a ninguna resonancia de nada, ni le da una oportunidad al milagro, como dice Hugo que decía el petiso Guinzburg.
Además, compañeros oyentes, recuerden que este año nuestro Parrafus está en Por Amor al Arte, y no hagamos la macana de caer en las malas artes (la mala praxis) del googleo.
He dicho. Buenas noches.


(1) Para detalles acerca de esto ver la Entrada del 23 de mayo del 2008, en Entradas antiguas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Oiga! Lo que charlamos en el chat, se queda en el chat. No sea estómago resfriado.
M.

Marcelo Perenchio dijo...

¿Charlar en el chat? Bueno, lo otro, por supuesto. Pero, ¿qué? ¿Miedo a inquietar al Lector Nacional?

Anónimo dijo...

Bueno, me refiero a lo que comentás en la entrada de hoy, que según decís fue "via chat".
No es miedo, pero prefiero los ámbitos donde las comunicaciones privadas sigan siendo privadas. No se, al menos podrías preguntarme antes de publicar algo en mi nombre.

Marcelo Perenchio dijo...

¿Publicar en tu nombre? Publiqué como Marcelo Perenchio, sorry. Pero, ¡nos peleamos en privado, por favor!

Anónimo dijo...

qué falta de respeto a lo que habló con una mujer
mucho libro pero poca educación...