Me agrada un cementerio
de muertos bien relleno
manando sangre y cieno
que impida el respirar,
y allí un sepulturero
de tétrica mirada
con manos despiadadas
los cráneos machacar.
El fragmento, pertenece a una poesía del español José de Espronceda.
Con motivo del fraude ¿"patriótico"? que implementó Justo para las elecciones de 1935 en adelante, en La Playosa y Villa María (Cba.), se la publicó parodiada como sigue
Me agrada un cementerio
de muertos bien relleno,
manando sangre y cieno
que impida el respirar,
y luego el Dr. Vocos
en aras de un licor
volverlos a la vida
¡Y hacerse SENADOR...!
Hacía referencia a la fraudulenta elección en la que el conservador Miguel Angel Vocos, resulto "electo" senador provincial por el departamento, con el famoso trámite de hacer votar a los muertos y otra preciosuras del estilo, lo que no impidió que el radical Amadeo Sabattini fuera electo gobernador, derrotando al "caballo del comisario".
La historia la recibí de primera mano, de mi padre, que tenía una prodigiosa memoria, para recordar la historia que había vivido. A través de cositas como esta repasaba desde la guerra del 14 hasta bien entrada la segunda década infame.
Fernando Terreno
No hay comentarios:
Publicar un comentario