domingo, 27 de abril de 2008

Crónica de una derrota

Con cierto esfuerzo, no lo niego, los otros días reprimí la tentación de esbozar alguna pista acerca del último Ininterruptus de Párrafus.
Pensé en escribir, por ejemplo:
“El nombre del autor de anoche es uno de los que barajamos con Cristina para ponerle a nuestro bebé; un nombre corto, como Hugo me recomendó cuando conté lo del embarazo. La última palabra del título, la que no pude recordar, es un nombre –pero femenino.”
O algo por el estilo.
Pero no lo hice. Sin ganas de escribir, como me sentí durante toda esta semana, pude controlarme y pensé -¡por una vez!- que aquello sería una jactancia inconducente.

Esa noche, el lunes, la reiterada mención de Oxford me hizo pensar que el autor podía ser un inglés. La desfachatez de la prosa me sugirió que se trataba de un contemporáneo. Y por ahí, la insistencia que me pareció notar con el tema del padre, me llevó a pensar en Martin Amis, hijo de un escritor. Llamé para preguntar si era él y, ante la confirmación, dije los dos títulos que primero recordé: “El tren de la noche” y “Agua pesada” –aunque sé que este último es un volumen de cuentos. Después llamé otra vez y dije “Luces de neón”, queriendo decir “Campos de Londres”. Pero tampoco era esa la novela.
Más adelante, recapitulé que al comienzo de la lectura, tras la mención de una estantería, se omitía una palabra. Pensé que esa palabra podía ser “libros”. Y recordé un título, parte de un título, que no asociaba con Amis, pero podría ser…
Pregunté si la respuesta correcta empezaba ”El libro de…”. Rodrigo dijo que no me podía decir eso. Entonces lancé: “El libro de Ruth”. Pero no era. Después llamé otra vez: “¿El libro de Daniel?” Tampoco.
Cómo es la memoria, ¿no? Recuperé la inicial y el sonido del nombre, pero no pude dar con “Rachel”. Y bueno, que sea Ininterruptus entonces, pensé, y no llamé más.

Al otro día busqué en casa de mi vieja un viejo suplemento cultural de Clarín con una entrevista a Amis, en ocasión del lanzamiento simultáneo, en inglés y castellano, de “El tren de la noche”. Es del 2 de octubre de 1997 y la entrevista la hizo Jorge Halperin. En el preámbulo, encontré el título completo: “El libro de Rachel”. Y esa noche, en el siguiente programa –como astutamente hiciera en el caso de César Aira-, Hugo repitió el autor. Esta vez, con “Tren Nocturno”, nueva traducción de aquella novela del 97. Ganó –esta vez sin mis pistas- Marta Sanders, de Bahía Blanca. Dos noches después gané yo (con “El silencio de los inocentes”, de Thomas Harris) y el premio fue un libro de entrevistas de Jorge Halperín.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

SE LLAMA MARTA SANDERS O JORGE ALOY 2 ? NO,ELLA ES UNA SEÑORA Y NO RECIBIRA LOS VENENOSOS DARDOS POR USAR INTERNET PARA GANAR, INCLUSO RECIBIO DOBLE APLAUSO POR PARTE DEL CONDUCTOR...
FELICITACIONES!!!!

Anónimo dijo...

SE LLAMA MARTA SANDERS O JORGE ALOY 2 ? NO,ELLA ES UNA SEÑORA Y NO RECIBIRA LOS VENENOSOS DARDOS POR USAR INTERNET PARA GANAR, INCLUSO RECIBIO DOBLE APLAUSO POR PARTE DEL CONDUCTOR...
FELICITACIONES!!!!

Marcelo Perenchio dijo...

Qué malo el amigo Anónimo! Me recuerda a un cierto resentido social que conozco... Acerca de Marta Sanders, ahora que este comentario se refiere a ella tan ácidamente, me animo a anotar acá un chiste que se me ocurrió ayer, mientras escribía, y que también reprimí: "¿Cómo le dicen a Marta Sanders?" "Pastilla del día después. Porque se especializa en resolver Ininterruptus" Perdón, Marta, es con todo respeto y admiración. A propósito, ¿averiguaste el de anoche? Yo sí. ¿Te ayudo? Con el autor se da un caso parecido al de Martin Amis. El mismo parecido -pero a la inversa- que se da con uno de los Ininterruptus de diciembre que permanece incógnito. Y, a propósito, a Hugo le recomendaría un libro del psiquiatra David Cooper: "La muerte de la familia". Pero mejor no.

Anónimo dijo...

al dia siguiente de no develarse el parrafus, todos saben quien era, que inteligentes son, y lo hablan por telefono privadamente, como secreto de estado !!!